Espíritu Santo, Amado…

Déjame sentir Tu Ser…

Que Tu vibración me roce

leve y sutil como ayer

 

Que me sienta en pleno goce

en silencio…Sólo estando…

Que sólo en Tí permanezca

en quietud y meditando…

 

Bríndame Tus pensamientos

Enséñame Tus caminos

Guíame por el sendero

Cobíjame con Tu abrigo

 

Dame vista panorámica

y amplitud de la conciencia

Perdóname los errores

y trátame con paciencia

 

Tú conoces la intención

que hay dentro del corazón

No permitas que me empeñe

en mis sueños sin razón

 

Utilízame, Señor,

como instrumento en Tu obra

Salva este mundo, Maestro,

que se estremece y zozobra

 

Enséñame a no apurarme

sino a esperar reposando

En paz…En tranquilidad

y en Tu voluntad confiando

 

Caracas, 12 de mayo de 2015

5:00 a.m.