Fuente de la inspiración

más bella que se ha creado

Fuente de la voluntad

que da fuerzas al cansado

 

Fuente de toda bondad

y del más profundo amor

Fuente de toda la paz

que cubre nuestro dolor

 

He sentido Tu poder

y cada día me estremezco

por haber yo recibido

aquello que no merezco

 

Una pluma bendecida

y un ruiseñor primoroso

Con ellos escribo y canto

al Espíritu glorioso

 

El Padre nos mandó al Hijo

y el Hijo Te dejó aquí

para que nos des consuelo

y nos des reposo en Ti

 

Espíritu en Movimiento,

¡Haz que crezcan las virtudes!

Riéganos con Tus caricias

y acompaña las quietudes

 

Fortalécenos las alas

pues anhelamos volar

para esparcir Tu palabra

y sabiduría alcanzar

 

¡Gracias por estar aquí!

¡Gracias por Tu bendición!

¡Gracias por guiar nuestros pasos!

¡Gracias por la sanación!

 

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Caracas, 25 de diciembre de 2012

7:00 a.m.