No temeré yo la afrenta
de un sencillo hombre mortal
No temeré a quien pretende
tan solo causar el mal
Confiaré en Tí, Padre eterno,
y seré yo al mundo sal.
Confiaré yo en Tu justicia
que es pura y que es celestial
Prefiero crucifixión
a una vida de mentiras
No temeré mal alguno.
Sabes todo…Todo miras
Y conoces los deseos
de adentro del corazón
Conoces los pensamientos
que pasan por la razón
Tú ves nuestra alma al desnudo
Tú diseccionas…Penetras
No hay nadie que a Tí te engañe
Tú ves palabras y letras
Tú lees hasta lo no escrito
Oyes lo que no se hablado
Tú ves lo que ahora no existe
Tú sabes lo que he soñado
Los que creen que ya han triunfado
no entienden que Tú controlas
cada instante, cada paso,
y hasta el vaivén de las olas.
Y no entienden que este pleito
será por Ti defendido,
y no saben que ya Tú
me has hablado a mí al oído.
Confiada reposo hoy
y me siento en paz y calma,
pues no importa lo que pase,
eres dueño de mi alma
Y sé que estoy esculpida
en la palma de Tu mano,
y que jamás temeré
de nuevo a otro ser humano
Cada día me fortalezco
en Tu palabra, Señor.
Tú repones mi energía
y Tú me llenas de amor
Tú me enseñas con paciencia
y repites la lección
Me dejas ver mis errores
con calma y dedicación
Tú me alientas cuando caigo
Tú me ayudas cuando fallo
Tú me animas, me consuelas…
me muestras dónde me hallo
Tú me guías por el camino
Tú sanas y purificas
Por nosotros, siendo nada,
Tú das y te sacrificas
No necesito yo nada,
pues en Tí todo lo tengo
No hay ya quien me paralice
Ya ante nadie me detengo
Pues yo a Tí te seguiré,
y con mis ojos veré
Pues Tu mensaje yo oiré
y siempre Te alabaré
Has cambiado Tú mi vida
Del yugo me has liberado
Liberaré yo a los otros
como Tú me has enseñado
No temeré nunca más
Viviré valientemente
Y enseñaré yo a los otros
a mirar siempre de frente
Lexington, 27 de abril de 2012
4:00 a.m.
Comentarios Recientes