(Para Arturo)

 

Vive siempre en nuestra mente

Vive siempre en nuestra alma

Vive siempre en nuestro ser

Danos Tu paz y Tu calma

 

¡Vive, Señor!…¡Vive!…¡Vive!…

¡Vive para que vivamos!

Pues vida sin Tu presencia

no es vida aunque lo creamos

 

Vive en nuestros corazones

Vive siempre en nuestro hogar

Vive a través de nosotros

y enséñanos así a amar

 

Caracas, 28 de enero de 2014

7:30 a.m.